Pues sí. Nunca mejor dicho aquello de que en casa de herrero, cuchillo de palo. Tan pendiente estoy de las web y los trabajos de otros que me olvido de actualizar mi propio escaparate. No tengo excusa, lo sé. Trataré de ser más disciplinada.

Y en estos meses ya se han publicado las dos últimas web en las que he trabajado. La primera es la de una almazara cordobesa, Almazara 1945, para quien he hecho los textos a través de Al Margen. Almazara 1945 es una empresa relativamente joven con un aceite espectacular (quizás está mal que lo diga yo, pero es que he tenido el gusto de catarlo y lo recomiendo).

La segunda es la web de la clínica de periodoncia de los doctores Antía & Fernández. Para esta web he hecho los textos gracias al encargo de É, estudio que también ha diseñado la página. La verdad es que guardo grandes recuerdos de las visitas a la clínica. Creo que nunca antes me había sentido tan a gusto en un lugar así. Tengo que confesarlo: ellos han sido los culpables de que me compre un cepillo eléctrico y, desde entonces, ya no miro igual las bocas de las personas.